miércoles, 25 de mayo de 2016

FANTASÍA DE VERANO



Sentir el calor de tus besos
es sentir la dulzura de la gloria,
mirarme en tus ojos de esmeralda
me lleva a los más sublimes paraísos,
es enredarme en tus cabellos risos,
recorrer tu cuerpo en lo profundo 
y suspirar de placer por un instante
como un bardo frente a la luna
que arrulla a su niña en la cuna
escribiendo un verso galante.

Mi fantasía en aquel fugaz verano
fue amarte bajo el cielo espléndido,
llevarte entre espumas de la mano
por un mar ignoto  ahora perdido.
Era la pálida hora del arrullo,
tú, entonces altanera, dejaste tu orgullo,
te hiciste al amor en el tálamo mullido
sólo de una loba en celo se oía el aullido,
yo, temblando cual trémulo gorrión,
como un romero enamorado te di mi corazón.



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